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El código de barras cumple cuarenta años

Un día como hoy hace cuarenta años las principales asociaciones de la industria agroalimentaria estadounidense dieron luz verde al estándar GS1 de identificación electrónica de productos. Es cierto, el nombre no dice mucho, pero se refiere ni más ni menos que al popular código de barras que cumple 40 años de inundar las etiquetas de miles de productos en todo el planeta.Por José Luis Rojas Ramírez



Es verdad, de entrada no parece cierto que algo tan conocido y que utilizamos diariamente tenga tan solo cuatro décadas. Y es que, un día como hoy hace cuarenta años las principales asociaciones de la industria agroalimentaria estadounidense dieron luz verde al estándar GS1 de identificación electrónica de productos. Es cierto, el nombre no dice mucho, pero se refiere ni más ni menos que al popular código de barras que cumple 40 años de inundar las etiquetas de miles de productos en todo el planeta.
Es más, la presencia del código de barras es tan implícita en nuestras vidas que se estima que cada día se escanean una media de 5.000 millones de códigos de barras. Según la asociación que gestiona el estándar, los códigos de barras son utilizados por más de dos millones de empresas de 150 países en sectores tan dispares como la alimentación, la electrónica o la defensa.
Sin embargo, el debut del código de barras no estuvo seguido de un éxito inmediato y aún tuvieron que pasar años antes de la adopción universal que ostenta el día de hoy. En el camino tuvo que aguantar teorías conspiratorias que aseguraban que era utilizado por el gobierno para espiarnos, y hasta protestas de grupos ultra católicos que creían que las barras escondían el número de la bestia. Pero bueno, eso es normal entre la gente que tiene como pasatiempo buscarle las cinco patas al gato ¿no?
En la actualidad, las etiquetas con código de barras conviven con otros sistemas 2D capaces de almacenar más información, como los códigos BiDi o QR. Ambos coexisten a su vez con las etiquetas RFID, compatibles con NFC y que se postulan como el futuro del etiquetado.
Con este panorama la pregunta es ¿Cuál es el futuro del código de barras? Pues lo cierto es que con el auge de los smartphone es posible que pasados unos años, un par de reuniones de Asociaciones de la industria alimentaria y alguna que otra denuncia de que el NFC es satánico y produce cáncer, estemos dejando de lado el conocidísimo código de barras estemos haciendo nuestras compras con solo pasar el teléfono por un nuevo código estándar que se encuentre en los productos que utilizamos y consumimos todos los días. 

Vía Xataka

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